Los aceites esenciales imprescindibles en mi botiquín aromático base
El mes pasado, en este mismo blog, he compartido algunas pautas de como bien comprar un aceite esencial y “no morir en el intento” dada la popularidad de la Aromaterapia y la enorme oferta de los aceites esenciales no siempre de la mejor calidad. Hoy seguiremos hablando de los aceites esenciales: ya sabes que es la principal, aunque no la única herramienta de un aromaterapeuta. Recuerda que además de los aceites esenciales necesitarás aceites vegetales, mantecas, arcillas, hidrolatos…
Pero centrémonos en los aceites esenciales. Una vez que sabes cómo elegir un buen aceite esencial, la siguiente pregunta que seguramente te haces (sobre todo si recién comienzas tu viaje aromático) es: ¿y qué aceites compro?
Te recomiendo empezar por un “botiquín base”
La aromaterapia pertenece al paradigma de las terapias holísticas donde lo más importante no es el remedio sino la persona. Y donde no hay “remedios universales” para “síntomas determinados”, porque cada quien somos un mundo, y los profesionales holísticos siempre singularizamos nuestras recomendaciones adecuando los remedios a la persona y no la persona a los remedios.
Por supuesto que los remedios tienen acciones concretas que hay que conocer y elegirlos de acuerdo a la “circunstancia” que estamos viviendo. Pero no pierdas de vista que tu (o la persona que vas a atender), formas o forma parte fundamental de esa “circunstancia”.
Te comento todo esto para que tengas en cuenta, que la selección de los aceites esenciales que he elegido para el “botiquín base”, todos “de uso seguro” incluso en niños, está fundada en mi propia experiencia profesional y personal. Es posible, que tú quieras sustituir alguno por otro que te resuene más. Adelante! estás creando “tu botiquín”!
También es importante que los aceites que elijas, además de tener las propiedades que buscas, tienen que gustarte olfativamente. Sí, es un punto que a veces se nos olvida, pero es muy importante. Gran parte de su poder sanador está justamente en su afinidad olfativa para con la persona. Tenemos la suerte de que existen muchísimos aceites esenciales, por lo que si uno no te gusta, busca otro con propiedades similares pero que sea de tu agrado olfativamente.
VAMOS CON MI BOTIQUÍN AROMÁTICO BASE:
1. LA UNIVERSAL LAVANDA
El número uno de mi botiquín desde siempre, es la lavanda. Todo un clásico. La famosa Lavandula angustifolia. Cuando compruebas por ti mismo una y otra vez su gran poder terapéutico, y además te enamoras de su aroma (ten cuidado: al ser un aceite muy popular, desgraciadamente se presta a muchas adulteraciones), se convierte en tu mejor aliado. Este gran aceite esencial tiene muchas propiedades: es antiinflamatorio, antiespasmódico, antálgico, cicatrizante, regenerante celular, antiinfeccioso, antibacteriano, antifúngico, calmante, ansiolítico. Te servirá para tratar estados de angustia y ansiedad, el nerviosismo, dificultad para dormir, problemas de la piel (eczemas, quemaduras, heridas, pieles irritadas, picaduras de insectos). Es interesante para calmar el dolor de barriga y el dolor de garganta y también para los dolores musculo-esqueléticos.
2. LA INMORTAL SIEMPREVIVA
Helichrysum italicum es uno de estos aceites que quieres tener al lado en caso de un accidente: se dice de él que es el mayor “sanador de heridas” de entre todos los aceites. Son destacables su actividad antimicrobiana, antiinflamatoria y antioxidante, pero sobre todo: su actividad antihematoma y descongestiva a nivel circulatorio. También es mucolítico, expectorante, antiespasmódico, hipocolesterolemiante y cicatrizante. Lo vas a necesitar cuando te das un golpe, pero también es un gran aliado si tu herida va más allá de tu físico… un imprescindible.
3. RAVINTSARA: EL ÁRBOL MEDICINA
En Madagascar, su lugar de origen, Cinnamomum camphora se considera “árbol medicina” y su nombre quiere decir: “hojas buenas para todo”. El aceite esencial tiene poderosas propiedades antivirales, anticatarrales, estimula el sistema inmunitario y es expectorante. Es apreciado para tratar casos de herpes. Muy útil en caso de estrés resultante del cansancio extremo tanto nervioso como físico, ya que es energetizante y neurotónico. Para tenerlo muy a mano sobre todo en tiempos de cambios de estación y epidemias…
4. LA RICA MANDARINA
En un botiquín no puede faltar un cítrico: elijo la mandarina (Citrus reticulata) porque me gusta llevar conmigo algo de lo que estoy segura que gustará a los niños. La mandarina no falla. Su aroma levanta el ánimo y crea ambientes distendidos: muy buenos resultados en difusión. Además, tiene propiedades carminativas, eupépticas y relajantes. Excelente para calmar el sistema nervioso, y trabaja muy bien los miedos nocturnos incluso de los más pequeños.
5. ALBAHACA EXÓTICA – EXCELENTE ANTIESPASMÓDICO
Seguro que conoces la albahaca, o bien porque te gusta la cocina mediterránea, o bien porque tienes una macetita de albahaca en tu ventana que actúa como un eficaz repelente de mosquitos. El aceite esencial de albahaca exótica Ocimum basilicum es una verdadera joya. El quimiotipo metil-chavicol es uno de los mejores antiespasmódicos y tiene una gran afinidad con la musculatura. Es un potente antiinflamatorio y antálgico. Te va a servir para aliviar cualquier tipo de dolor de tipo espástico (dolores menstruales), calambres, contracturas y tensiones musculares, e incluso dolor articular. Por otro lado, facilita la digestión, calma la acidez estomacal y las flatulencias. Además, es muy útil ante la falta de concentración, los pensamientos negativos y el estrés. Ya ves: ¡muy universal!
6. EL TOQUE FLORAL de GERANIO
Nuestro gran aliado de la piel. El aceite esencial de Pelargonium graveolen es antálgico, antibacteriano, antifúngico, tónico y astringente. Tiene una particular propiedad hemostática: muy útil aplicado puro en caso de un corte sangrante. Se usa para tratar todo tipo de afecciones dermatológicas y para el cuidado cotidiano de la piel. También ayuda ahuyentar los mosquitos, además su agradable olor floral es mucho más suave que el de la clásica citronela. Es un buen desodorizante, y hay quien lo usa como perfume…
7. EL SAGRADO INCIENSO
Seguro que te suena como uno de los regalos que los Sabios de Oriente le brindaron al niño Jesús… Entonces se utilizaba en forma de resina. Hoy en día, además, tenemos la posibilidad de disfrutar del producto de su destilación: el aceite esencial Boswelia carterii o Boswelia sacra entre otros muchos aceites de la familia Boswelia. Quizás su principal uso tiene que ver con su capacidad de ayudarnos a ubicarnos “aquí y ahora”: ayuda a aquietar la mente y favorece estados meditativos. Pero no menosprecies sus propiedades cicatrizantes, inmunomoduladoras, regeneradoras y tonificantes de la piel. Muy buen aliado para trabajar la amplitud respiratoria y en general problemas respiratorios. Y su aroma es simplemente reconfortante.
Ojalá que esta selección te sirva de orientación para crear tu propio “botiquín base”. No es fácil recoger en unas pocas líneas todo el potencial de cada uno de los aceites mencionados. Espero que este breve resumen te inspire a descubrirlos. Recuerda que por ser naturales no son inocuos: bien empleados no son peligrosos, pero sí poderosos.
Si necesitas una guía de como utilizarlos con seguridad: en este enlace tienes una pequeña clase maestra gratuita, muy completa, que preparé sobre este tema: https://formacion.escuelandalusi.es/aromaterapia_introduccion
Magdalena Szaszkiewicz
Naturópata y Aromatóloga
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Feliz de contestar a tus preguntas si las tuvieses. Escríbeme al: aromaterapiaevolutiva@gmail.com
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