Si tienes rosas en tu casa, y en primavera mueres con su aroma, puedes utilizar sus pétalos, para hacer agua de rosas.
Es una buena forma de aprovechar la naturaleza a nuestro favor, gastar menos dinero en productos, y comprar menos plástico.
1. Recolecta los pétalos cuando están a punto de caerse (no oxidados). Te darás cuenta porque si tiras de uno de ellos, se sale sin hacer fuerza.
2. Colócalos en una cacerola con tapa, y cúbrelos con agua destilada.
3. Cocínalos tapados durante 20 minutos a fuego lento.
4. Apaga el fuego y deja que se enfríe. Así caerán todas las gotas que se han quedado pegadas en la tapa, que estarán cargadas de aceite esencial de rosas.
5. Una vez frío, cuela los pétalos, estrújalos para que suelten todo su líquido, y envasa en algún botellín de vidrio con tapa, o si tienes, alguno con spray.
Por las noches, luego de limpiarte la piel de la cara, aplica el agua de rosas y guárdala siempre en la nevera.
