Cuidado de plantas de interior en la época fría
Comienza la época en la cual la temperatura empieza a descender y los días comienzan a hacerse más cortos. Los meses fríos, a diferencia de lo que uno imaginaría, es la época del año donde las plantas de interior necesitan especial atención y mayores cuidados, ya que están más propensas a desmejorarse y sufrir estrés.
¿Por qué decimos que esta época es crítica para nuestras plantas de interior, si se encuentran protegidas del clima frío dentro de nuestros hogares?
El frío exterior nos lleva a mantener nuestras puertas y ventanas cerradas por más tiempo y se encienden los artefactos para calefaccionar el hogar. Estos dos factores implican que el ambiente se vuelva más seco y menos ventilado. Por otro lado, en esta época hay menor radiación solar factor que no favorece al crecimiento de las plantas. Esta disminución de la radiación es debido a los días más cortos (menor cantidad de horas luz) y a la mayor cantidad de días nublados o con lluvia. Todos estos factores juegan un papel clave en el vigor y la sanidad de nuestras plantas. Por eso es necesario prestar especial atención a los cuidados que vamos a dispensarles en estos meses más fríos.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta, es la regulación del riego y la humedad ambiente. Lo que se recomienda para esta época del año, es aumentar la humedad ambiente, pero disminuir el riego, es decir disminuir la humedad del sustrato.
¿Por qué? ¿Qué se debe tener en cuenta?
Lo que debemos tener en cuenta es que las plantas disminuyen su taza de crecimiento, que la demanda atmosférica es menor, ya que hay temperaturas más bajas y poca radiación, lo que conlleva a un menor requerimiento de agua por parte de las plantas. Si mantenemos la misma frecuencia e intensidad de riego que en verano, el exceso de agua que se va a producir va a generar enfermedades fúngicas, podredumbre, asfixia radicular, entre otros. Por ende, debemos espaciar el riego y disminuir la cantidad de agua vertida. Pero en contraposición a la disminución de la frecuencia e intensidad del riego, tenemos que aumentar la humedad ambiente.
¿Cómo logro esto?
La humedad ambiente podemos aumentarla realizando pulverizaciones en las hojas de nuestras plantas, poniendo un humidificador en el ambiente donde se encuentren las mismas o colocando algún cuenco con agua sobre los radiadores o fuentes de calor de nuestro hogar, que se encuentren próximos a la zona donde hemos colocados las plantas.
Otro punto a tener en cuenta es la ubicación que le damos a nuestras plantas, muchas veces es necesario reubicarlas en otoño e invierno y colocarlas en los lugares más luminosos de nuestro hogar, para aprovechar las pocas horas de luz que hay en esta época y mantenerlas a su vez alejadas de cualquier fuente de calor, como pueden ser radiadores, calefactores, hogares, etc.
Es común pensar que las plagas aparecen en los meses de primavera y verano con el calor y el crecimiento exponencial de las plantas, pero en otoño e invierno, también tenemos que controlarlas para que las mismas no afecten a nuestras plantas. Para ello es importante realizar un monitoreo regular observando las hojas, principalmente el envés de las mismas, y también los tallos con el fin de detectar la presencia de algún insecto indeseable.
En esta época de frío lo más común es que aparezcan cochinillas y araña roja. En estos casos se debe realizar el control de la plaga, realizando la remoción manual de la misma y posterior aplicación del insecticida correspondiente para la especie en cuestión. Se recomienda que el producto elegido sea orgánico o ecológico, debido a que la aplicación la realizaremos dentro de nuestros hogares, con lo cual es importante evitar aplicar productos nocivos para la salud.
Y por último y no menos importante, tenemos la fertilización o abonado de nuestras plantas. La incorporación de nutrientes al sustrato es un punto clave para mantener nuestras plantas vigorosas y sanas.
Realizaremos una fertilización en otoño, para ayudarlas a atravesar el invierno, en las mejores condiciones ambientales posible.
Durante el invierno nuestras plantas detienen su crecimiento, pero no te preocupes porque retoman su crecimiento activo en primavera, por este motivo, antes de comenzar la primavera se deberán fertilizar, para favorecer el rebrote y crecimiento de las mismas.
Es conveniente que utilices fertilizantes orgánicos, los cuales no sólo agregan nutrientes al suelo sino que también mejoran su estructura. También hay fertilizantes orgánicos foliares, que se pueden incorporar al agua de pulverización que utilizamos para aumentar la humedad ambiente.
Aprovecha este período del año, para realizar el trasplante de maceta, a una más grande con sustrato de alta fertilidad. Ya que en este período las plantas detienen su crecimiento, viéndose menos estresadas ante estos cambios. Y, por otra parte, al comienzo de la primavera cuando reactive su crecimiento, la planta se encontrará con mas espacio para el desarrollo de sus raíces y sustrato nuevo, con alto contenido de nutrientes, lo que le permitirá un rebrote rápido y vigoroso.
Así que, aunque comienza el frío, tendremos que poner manos a la tierra y dispensarles todos los cuidados necesarios a nuestras amigas con clorofila.
¡Feliz otoño! Nos encontramos en el próximo artículo.
Rocío Diuorno
Ingeniera Agrónoma
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